Hoy ha sido un día laaaaaaaargo e intenso. A las 8:10 de la mañana ya estábamos caminando con lo que hemos sido los primeros en hacer la excursión y a las 20:45 terminábamos la última excursión del día, por lo que hemos sido los últimos en salir del parking.
Esta mañana hemos salido a hacer el circuito circular del Hljodaklettar en el PN del Jökulsárgljúfur.
Ha sido una excursión fantástica por varias razones. La primera es que está alejada de los circuitos turísticos más habituales y no hemos coincidido con nadie. La segunda es que el tiempo ha acompañado y la tercera porque hemos visto un montón de cosas interesantes diferentes:
- el cañón del río Jokulsá;
- formaciones de basalto y obsidiana con un montón de formas diferentes: rosetones, columnas, cuevas, espinas, costillas, ...;
- media caldera volcánica que se precipita hacía el río de manera casi vertical y combinando infinidad de tonos ocres, rojizos, grises y negros;
- un bosque de ¿abedules? lleno de florecillas de todos los colores.
La siguiente parada tras 13 kilómetros de carretera de grava y baches ha sido Asbyrgi. Es una garganta con forma de herradura con mucha vegetación. Los acantilados que la flanquean son totalmente verticales y rectos. Se puede recorrer en coche y al final de ella hay un pequeño paseo a un estanque y a un mirador a toda la garganta. Se formó por un "jokulhlaup" o una megariada provocada por un deshielo brusco del glaciar tras una erupción. Ahora el río ha cambiado su curso dejando la garganta tal y como es ahora.
Poco después del mediodía hemos llegado a Husavik, centro turístico especializado en el avistamiento de ballenas. La bahía en la que se encuentra favorece que los cetáceos se adentren en ella a alimentarse.
Hemos salido durante tres horas en un barco para intentar localizar algún ejemplar.
La experiencia ha sido fantástica, lucía un sol esplendido, no hacía frío ni soplaba viento y el mar estaba en calma, muy plano, además hemos conseguido ver al menos dos ejemplares diferentes de ballenas jorobadas. La excursión ha empezado acercándonos a una isla en la que viven miles de frailecillos y otras aves. Los frailecillos iban a pescar y volvían a la isla con el pico lleno de pececillos.
Avistar las ballenas no es tarea fácil, el barco se acerca a los puntos donde se han visto las columnas de vapor generadas por la respiración de las mismas pero a veces llegábamos demasiado tarde y se habían vuelto a sumergir. La experiencia del patrón y de la guía es una ayuda imprescindible y hemos podido ver algunos ejemplares desde muy cerca. El precio no es barato pero la experiencia merece la pena. Ha sido una suerte que hiciera sol, sino hubiéramos pasado muchísimo frío. Te recomiendan que te abrigues con dos o tres capas más de ropa de las que llevas en tierra.
Hay dos empresas diferentes que realizan las excursiones en barco y en ambas a media excursión te sirven chocolate caliente y rollitos de canela. Nos han gustado mucho los cinnamon rolls y al volver a Tarragona he aprendido a hacerlos en casa. Hugo se ponía en la cola para coger dulces una y otra vez y ha tenido que practicar su inglés diciendo "another, please".
Tras acabar el "avistamiento" nos hemos dirigido a la zona del lago Myvatn por la carretera 85 y la 845. Alrededor del lago existen numerosas atracciones turísticas diferentes y en las que siempre te ves acompañado de enjambres de centenares de mosquitos que revolotean a tu alrededor, afortunadamente llevamos repelente y ha resultado muy efectivo (Haley).
La primera parada ha sido Skutustadagigar, unos falsos cráteres de unos 10m de altura formados por explosiones de gas del subsuelo. Existen multitud y muy juntos por lo que es una zona muy recomendable, aunque, posiblemente, la mejor manera de visitarlo sea desde el aire.
Después hemos ido a Hofdi, una zona donde la tierra y el lago se entrecruzan y donde existen pilares de lava llamados "Klasar". Esta zona se formó al llegar la lava líquida al lago y provocar explosiones de vapor de agua al quedar encerrada el agua en el interior de la lava (como en una olla a presión sin válvula de seguridad).
La tercera visita ha sido al cráter del volcán Hverfell. El volcán tiene unos 460m de altura y de forma ovalada con una longitud máxima de 1040m. Desde el parking situado a pie del volcán, se puede llegar al mismo borde del cráter tras subir una rampa con mucho desnivel. Pero el esfuerzo merece la pena por las vistas al interior y al exterior del cráter. Se puede ver el lago y los alrededores. Lástima que hiciera mucho viento y empezara a chispear lo cuál no invitaba a permanecer en la cima más que el tiempo indispensable para hacer las fotos de rigor.
Para terminar el día nos esperaba una sorpresa. Hemos decido ir a pasar la noche al área del volcán Krafla. Es una zona con actividad volcánica, con multitud de fumarolas, donde los cráteres humean y el río que baja paralelo a la carretera también lo hace.
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