Día 23. Cedar Point (Sanduski, Ohio)

Cedar Point es un destino turístico clásico. El parque tiene 113 años de antigüedad, en el hotel y dentro del parque nos hemos ido encontrando fotos y hasta un museo de como era cuando empezó y como ha ido evolucionando.

Llovía cuando nos hemos levantado. Aún así nos hemos puesto los chubasqueros y nos hemos ido al parque, estábamos impacientes por empezar a subir en todas las atracciones posibles.

Pero estaban todas las cerradas a causa del tiempo. A ratos la lluvia amainaba un poco y empezaban a hacer pruebas para poner en marcha algún cacharrito, pero enseguida volvía a llover fuerte y lo paraban.

Sólo hemos conseguido montarnos en Cedar Creek Mine Train, una montaña rusa light parecida al tren de la mina de Port Aventura.

Aburridos de ver todo cerrado y de estar como tontos bajo la lluvia nos hemos ido a Sandusky, el pueblo más cercano a Cedar Point. 

Necesitábamos comprar algunas cosas en el súper y hemos decidido también ir a comer. La parte buena de la lluvia es que hemos encontrado un restaurante donde todo estaba buenísimo y baratísimo al lado del puerto y hemos comido de maravilla.

Cuando vamos a comer a algún sitio y vienen a tomarnos nota de la comida, Edgar pide la suya, por ejemplo " I Would like a double cheeseburguer" y luego contesta las preguntas del camarero sobre  que tipo de patatas elige de acompañamiento y si quiere tomate y lechuga. Cuando llega el turno de Hugo, él simplemente dice "the same" (lo mismo). No sabemos si es que siempre le apetece comer lo mismo que a su hermano o simplemente ha elegido el camino fácil para no tener que comunicarse en inglés.

Hemos acabado de comer y ¡al fin! ha parado de llover, así que a las 14:30 h hemos empezado nuestra ruta kamikaze. Edgar, Hugo y Txus habían comprado un pase exprés para subir en las atracciones haciendo poca cola, y lo han amortizado, porque en algunos sitios había más de dos horas de espera. Estela, como pensaba sólo subir en algunas atracciones no ha querido invertir en el exprés.

Hemos decidido dejar de lado todas las atracciones de agua y todas las "de feria" y nos hemos concentrado en las verdaderas joyas del parque.

Edgar, Hugo y Txus han subido a 14 montañas rusas diferentes, repitiendo al final las que más les habían gustado. Estela sólo se ha atrevido con 5 de ellas. Algunas estaban recién estrenadas y otras tenían medio siglo de antigüedad, aquí hay para todos los gustos, con loopings, con bajadas, de ir sentado, de ir de pie, de ir colgado, de madera, de metal… todo lo que os podáis imaginar y más.  La lista por orden:

Cedar Creek Mine Train. Tren de la mina. (Sorry, no picture)

Magnum XL-200. Hipercoaster con mucho tiempo de vuelo. Parecida a Shambhala

Gemini. Tren de la mina gigante con dos carros que compiten. Vías de hierro.

Maverick. Launch coastrer tipo Furius con dos launch, caída de más de 90 grados y múltiples efectos rompe cuellos.

Mean Streak. Montaña rusa de madera de Custom Coaster. Como la vieja Stampida.

Iron Dragon. Suspended coaster. Vagones como de noria.

Mantis. Un Dragon Khan pero en el que se va de pie.

Millenium Force. Hyper coaster, muy, muy rápida.

Top Thrill Drugster. Hyper Launch coaster. Sólo para freaks.

Corkscrew. El de toda la vida.

Power Towers. Space shot de 4 torres.

Wicked twister. Balancín en U con las dos torres verticales con tirabuzón.

GateKeeper. Giant coastrer con asientos a los lados de la vía. Durante la primera caída gira, por lo que el inicio del recorrido es por debajo del lift.

Raptor. Suspended coaster de Vekoma. Parecida a Jaguar y Tizona pero más rompecuellos.

Blue Streak. Montaña de madera de 50 años con muchos camela, y mucho traqueteo. 

Y la preferida, por unanimidad ha sido el Drugster, esta montaña rusa tematizada en los coches de carreras de aceleración es la estrella del parque. Cuando te montas en el tren avanzas un poco, se van encendiendo luces y al final como la formula 1, tres luces naranjas y una verde… y se empezaba a escuchar la aceleración y los gritos de la gente. Estabas unos 200 metros acelerando por una vía horizontal hasta que te ponías a 200 km/h! Ir tan rápido y acelerando tan rápido es una sensación indescriptible, hay que probarlo para entenderlo. A los 200 metros empezaba una subida vertical con tirabuzón incluido de 120 metros! En un momento estabas arriba y… zas! Hacia abajo también totalmente vertical con dos tirabuzones. Después de eso ya frenaba y la gente se volvía loca. Esta increíble atracción tiene DOS récords mundiales, de velocidad y de altura! (esto lo sabemos por los documentales que se chupa Hugo).

Edgar y Hugo además se montaron en la caída libre. A las 24h ya nos hemos tenido que ir porque cerraban y hemos llegado agotados a la cama, con la ración de liberar adrenalina cubierta para todo el año. 

Y ahora algunas fotos del parque. ;-)

Millas del día: 10.